Educación para la participación
Nunca el mundo fue tan diverso y tan complejo, con tantos factores condicionándose entre sí. La humanidad enfrenta hoy retos inéditos que necesitan de ciudadanos y ciudadanas responsables, conscientes de los retos y las necesidades, que toman parte y suman fuerzas, que cooperan solidariamente para buscar y poner en pie respuestas colectivas. Una sociedad en la que prevalezca la “cuidadanía”, la cultura del cuidado de las otras personas y del entorno.
La participación social consciente y responsable requiere la apropiación de ciertos conocimientos. Para tomar parte en cualquier proceso social, cultural, económico, político o educativo se debe conocer y entender mínimamente.
Recordando a Paulo Freire, el pensamiento crítico tiene mucho que ver con aprender a “leer” el mundo, a conocerlo e interpretarlo, y a “escribir” o expresar nuestra mirada personal y colectiva sobre él. No es posible promover la participación social sin estimular y ejercitar el pensamiento crítico en las personas.
Junto con el pensamiento crítico, la participación social también implica el desarrollo de valores y actitudes específicos. Por ello, será preciso aprender esos valores, reflexionarlos, entrenarlos, interiorizarlos…convertirlos en actitudes, personales y colectivas.
La Guía Educar para Participar se enmarca en un proceso de formación – acción desarrollado por la Red Mimbre y Entreculturas, entre los meses de marzo y junio de 2022 y quiere dar respuesta a estas necesidades. Centrándose en la propuesta metodológica de Educación para la Participación, con la intención de aportar esa lógica y mirada de intervención a personas educadoras y dinamizadoras de grupos que impulsan proyectos de carácter participativo.